Que la santa compañía de Dios me acompañe,
y que el manto de santa maría, su madre,
me cobije y me defienda de todo peligro.
Ave maría gratia plena dominus te cumpla,
me libre de todos los espíritus malignos,
bautizado y sin bautizar
Cristo vence, Cristo reina,
el Señor y justo individual
Hijo de María Virgen,
aquél que nació aquel solemne día,
que yo no pueda ser muerto,
ni me quieran mal,
que los que tengan ojos no me vean,
los que tengan manos no me toquen,
que el hierro no me hiera
y los nudos no me aten.